Mientras los Santos Esposos cumplen todos los preceptos de la Ley del Señor al ofrecer el niño puro en el templo, ellos se regocijan con la profecía de Simeón sobre la luz para todas las naciones y sufren con el pensamiento de la espada del rechazo.
Maravíllese con los Santos Esposos en la Luz de las Naciones venido a nosotros como un pequeño bebé. Considere como en la presentación de las ofrendas de pan y vino en cada Eucaristía hemos de unir la ofrenda de nosotros mismos a la auto-oblación de Cristo al Padre.
María, llena de gracia, y José, hijo de David; honor a ti, Madre de Dios, y a ti, custodio del Redentor. Eterna alabanza al Niño con quien formaron una familia, Jesús, Luz de las Naciones.
Santos Esposos, …