El Hijo de Dios nace en un establo pobre en el pueblo de David, recibe el amor de los humildes Santos Esposos y es adorado por los pastores pobres.
Con los Santos Esposos sea testigo de cómo la pobreza de la Natividad solamente sirve para poder apreciar más el amor infinito que Dios vertió para nosotros por medio del nacimiento de su Hijo. Con María, José y los pastores sienta la gran alegría de Emmanuel, Dios-con-nosotros. Con ellos adore a su Salvador, Cristo el Señor.
María, llena de gracia, y José, hijo de David; honor a ti, Madre de Dios, y a ti, custodio del Redentor. Eterna alabanza al Niño con quien formaron una familia, Jesús, Emmanuel.
Santos Esposos, …