El Salve
Dios te salve, Reina, y Madre de misericordia. Vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clemente, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María!
Oración del Papa León XIII a San José
A ti, bienaventurado San José, acudimos en nuestra tribulación y después de implorar el auxilio de tu Santísima Esposa, solicitamos también confiadamente tu patrocinio. Por aquella caridad con que la Inmaculada Virgen María, Madre de Dios, te tuvo unido y por el paterno amor con que abrazaste al Niño Jesús, humildemente te suplicamos que vuelvas benigno los ojos a la herencia que con su sangre adquirió Jesucristo, y con tu poder y auxilio socorras nuestras necesidades.
Protege, providentísimo custodio de la divina familia, la escogida descendencia de Jesucristo; aparta de nosotros toda mancha de error y corrupción; asístenos propicio desde el cielo en esta lucha contra el poder de las tinieblas; y como en otro tiempo libraste al Niño Jesús del inminente peligro de la vida, así ahora defiende a la Iglesia Santa de Dios de las asechanzas de sus enemigos y de toda adversidad, y a cada uno de nosotros protégenos con tu perpetuo patrocinio, para que a ejemplo tuyo y sostenidos con tu auxilio, podamos santamente vivir, piadosamente morir y alcanzar en el cielo la eterna bienaventuranza. Amén.
Letanía a los Santos Esposos
Señor, ten piedad, Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad, Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad, Señor, ten piedad
Padre Celestial que eres Dios, ten piedad de nosotros
Hijo Redentor del mundo que eres Dios, ten piedad de nosotros
Espíritu Santo, que eres Dios, ten piedad de nosotros
Santísima Trinidad, que eres un solo Dios, ten piedad de nosotros
Santa María, ruega por nosotros
San José, ruega por nosotros
Santos Esposos, rueguen por nosotros
Santos Padres de Jesús, rueguen por nosotros
Santos Custodios del Cuerpo de Cristo, rueguen por nosotros
Maestros del Santo Niño, rueguen por nosotros
Santos Vírgenes, rueguen por nosotros
Esposos amantísimos, rueguen por nosotros
Esposos fidelísimos, rueguen por nosotros
Esposos purísimos, rueguen por nosotros
Esposos justísimos, rueguen por nosotros
Esposos obedientísimos, rueguen por nosotros
Esposos humildísimos, rueguen por nosotros
Esposos generosísimos, rueguen por nosotros
Modelos de vida familiar, rueguen por nosotros
Modelos para parejas, rueguen por nosotros
Modelos para padres de familia, rueguen por nosotros
Padres a los faltos de padres, rueguen por nosotros
Patronos de los aún no-nacidos, rueguen por nosotros
Modelos para vírgenes, rueguen por nosotros
Amantes de la pobreza, rueguen por nosotros
Consuelo de los afligidos, rueguen por nosotros
Patronos de los emigrantes, rueguen por nosotros
Siervos del Señor, rueguen por nosotros
Ministros de Salvación, rueguen por nosotros
Madre y Patrono de la Iglesia, rueguen por nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros
Padre Santo, quien unió con enlace virginal a la gloriosa Madre de tu Hijo con el varón justo, San José, para que fueran fieles colaboradores del misterio del Verbo Encarnado, te suplicamos que meditando sobre estos misterios de la Encarnación y vida escondida de tu Hijo Unigénito, podamos vivir en unión más íntima con Cristo y caminar más gozosamente por los senderos del amor, por el mismo Cristo nuestro Señor. Amén.