Cuando la devoción a los Santos Esposos se hace extensamente popular en una diócesis, los fieles pueden pedir al obispo de la diócesis que la celebración litúrgica de los Santos Esposos se incluya en el calendario litúrgico propio de la diócesis, usualmente como memoria opcional. Si el obispo local aprueba la petición, entonces se requiere la confirmación de la Congregación para el Culto Divino y los Sacramentos. Congregaciones religiosas también pueden pedir que la observancia litúrgica se incluya en sus calendarios particulares.
Cuando la celebración litúrgica habrá sido aceptado por un número significante de calendarios particulares por el país por un período de tiempo suficiente (generalmente de 5 a 10 años), se podrá pedir que se incluya en el calendario litúrgico nacional.
Generalmente los calendarios particulares consisten de observancias de importancia propia del área local, muchas veces porque el santo particular vivía o ejercía el ministerio allí. La devoción a los Santos Esposos, por otra parte, tiene un significado universal que todavía se ha de reconocer. María y José son los patronos más universales, y sus desposorios son una parte innegable del misterio de la redención. Sin embargo, el proceso para la aceptación de la celebración litúrgica probablemente empieza con su re-introducción en los calendarios particulares, especialmente donde ya estuvo presente antes del Concilio Vaticano II, tal como los Estados Unidos de América desde 1840.
El 23 de enero llegó a ser la fecha más común para la celebración de la fiesta, pero de ninguna forma fue la única fecha, ya que ésta ha variado según el tiempo y el lugar. En el calendario particular de los Estados Unidos, el 23 de enero ya tiene dos memorias opcionales, aquella de San Vicente (trasladada del 22 de enero para favorecer el día de oración y penitencia por los actos de aborto) y Sta. Mariana Cope (canonizada en 2012). En vez de agregar una tercera memoria opcional ese mismo día, se podría sugerir que en los Estados Unidos los Santos Esposos se celebren en la fecha más cercana que está litúrgicamente libre, la cual sería el 19 o el 29 de enero.